La diabetes afecta a casi 26 millones de estadounidenses y los hispanos son más propensos a padecerla. Aunque es una de las enfermedades de mayor crecimiento en el país, hay maneras en las que usted puede protegerse. Esto es particularmente importante para los 79 millones de estadounidenses que tienen prediabetes, lo que significa que corren un alto riesgo de desarrollar la diabetes tipo 2.
Sin embargo, un gran número de personas desconocen la prevalencia de la diabetes. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), un cuarto de los estadounidenses diabéticos y el 90 por ciento de los prediabéticos, no son conscientes de que padecen la enfermedad. Para detener y controlar la condición, es necesario que la gente reconozca la conexión entre la diabetes y la salud bucal. Los investigadores han demostrado que existe un vínculo entre las enfermedades de las encías y un conjunto de condiciones de salud graves, incluida la diabetes. Los diabéticos tienen cuatro veces más probabilidades de sufrir enfermedades de las encías, según los Institutos Nacionales de la Salud.
Los siguientes cinco consejos le permitirán prevenir y tratar la diabetes y mejorar la salud bucal:
- Esté atento a los factores de riesgo y las señales de advertencia. Los factores de riesgo comunes para la diabetes incluyen presión arterial alta, estilo de vida sedentario, sobrepeso u obesidad, ser mayor de 45 años de edad o tener antecedentes familiares de diabetes. Las señales de advertencia frecuentes incluyen aumento del apetito, visión borrosa y hormigueo o insensibilidad en las manos, piernas y pies.
- Identifique maneras de controlar la condición. Hay muchas maneras de controlar la diabetes y prediabetes con más eficacia, entre ellas, hacer actividad física, además de establecer y lograr metas de aptitud física, beber abundante cantidad de agua, reducir bocadillos con muchas calorías y bebidas endulzadas con azúcar, y elegir alimentos integrales en lugar de productos de granos procesados.
- Cuide la salud de la boca. Practique una buena higiene bucodental, que incluya el cepillado y uso de hilo dental todos los días, así como el uso de un enjuague bucal. Las investigaciones demuestran que reducir la inflamación bucal puede disminuir los niveles de glucosa en la sangre de las personas diabéticas e incluso ayuda a mejorar su salud general.
- Visite a su dentista regularmente. Las visitas frecuentes al dentista también son importantes, ya sea para prevenir o tratar enfermedades de las encías. De hecho, las personas diabéticas que recibieron cuidado dental tuvieron reclamos médicos netos anuales mucho más bajos que las personas que viven con diabetes y no recibieron ese tipo de cuidado, según un estudio reciente conducido por UnitedHealthcare.