Meditar ayuda a tu salud!
Por eso cada vez más personas, religiosas o no, están siguiendo esta antiquísima práctica
Meditación, acción de pensar con detenimiento y reflexión. Aquellos que la practican están reforzando las conexiones de su cerebro y presentan una mayor cantidad de plegamientos en la corteza del mismo, según estudios.
El meditar, ayuda al incremento de la memoria, habilidad para procesar información y tomar decisiones.
Desde ejecutivos corporativos, quienes juran que les ayuda a ser líderes más eficaces, hasta estudiantes en las aulas de clase y toda la gama en medio encuentran que la meditación les da las herramientas para lidiar con el estrés de la vida moderna.
Pero, ¿qué es la meditación y cuáles son sus funciones y no solo religiosas, sino raíces filosóficas?
Es difícil de definir, pero en su expresión más simple significa vivir puramente en el momento, prestar atención a lo que se está haciendo y a cómo se está haciendo.
La mayoría de las tradiciones espirituales incluyen
formas de meditación, como la introspección silenciosa o la contemplación religiosa.
Pero los budistas, por ejemplo, la meditación es un componente importante en su camino hacia el despertar espiritual, hacia la iluminación.
Hay una variedad grande y desconcertante de técnicas de meditación, pero en general lo que todas pretenden es desarrollar las cualidades de conciencia de uno mismo, enfoque, compasión y por último el entendimiento y sabiduría.
Pero en el mundo laico, una de las grandes atracciones de la meditación son los beneficios para la salud.
Los beneficios de la meditación para la salud
Cerebro
La práctica de la meditación está asociada con cambios en la estructura física del cerebro.
Un estudio publicado en el 2005 del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos encontró que las áreas del cerebro asociadas con la atención y la manera en la que procesamos información sensorial eran
más gruesas entre quienes meditaban.
El estudio también indicó que la meditación podría hacer más lento el envejecimiento del cerebro.
Estómago
Con el estrés, nuestro cuerpo desactiva las funciones no esenciales como la digestión y la reproducción.
La Universidad Plattsburgh State de Nueva York encontró que la meditación puede indirectamente mejorar el funcionamiento del sistema digestivo pues reduce el estrés.
Y un estudio sueco de 2011 utilizó meditación de conciencia plena y mostró una reducción de los síntomas del síndrome de colon irritable que se mantuvo por más de un año después de completar el tratamiento.
Corazón
Como la meditación reduce el estrés y la ansiedad, se piensa que puede ayudar a reducir la presión sanguínea y las enfermedades cardíacas.
Un estudio llevado a cabo en Texas en 2003 entre pacientes mujeres con dolencias del corazón mostró una mejora significativa en la habilidad de las participantes para controlar los factores de estrés adversos.
Sistema inmunitario
La meditación puede estimular al sistema inmunitario o inmunológico.
Un estudio de 2003 publicado en ‘Psychosomatic Medicine’ encontró que los anticuerpos a la vacuna de influenza aumentaron significativamente entre los sujetos que meditaban.