Además de perfectas para disfrutar de una dieta deliciosa y saludable, las cerezas tienen otras muchas propiedades que ayudan a nuestro organismo. Te contamos por qué no pueden faltar en tus menús de este verano.
Estos pequeños frutos rojos poseen propiedades remineralizantes, desintoxicantes y antiinflamatorias, además de ayudar a eliminar los niveles de ácido úrico en la sangre. Además de contener solo 58 kcal. por cada 100 gramos, las cerezas son laxantes y diuréticas, gracias a su contenido en fibra, agua y potasio, por lo que son perfectas para disfrutar de un sabor dulce y suave al tiempo que ayudamos a nuestra dieta y a nuestro sistema digestivo.
Su alto contenido en hierro nos ayuda a prevenir la anemia, y son muy aconsejables durante la pre-menopausia pues tienen efectos ralentizadores ante la desmineralización de los huesos, ya que también contienen calcio y vitamina C. Además, su riqueza en bioflavonoide evita la degeneración celular, al tiempo que su alto aporte de antioxidantes es muy recomendable para combatir los radicales libres.
A pesar de tomarlas tradicionalmente como fruta fresca en comidas entre horas, o como postre, o saborearlas en diferentes dulces, las cerezas también pueden formar parte de deliciosas recetas saladas, en forma de salsas, guarnición, o como un ingrediente más dentro de las ensaladas que tanto apetecen ahora que llega el calor.
